Investigación realizada en el HCSBA sobre creación de unidades de cuidados de piel fue premiada en ceremonia

  • El trabajo obtuvo el cuarto lugar en la categoría Evaluación de Tecnologías Sanitarias por el importante impacto que tiene en relación al costo-beneficio económico y de satisfacción usuaria.

Una investigación realizada en el Hospital Clínico San Borja Arriarán (HCSBA), por parte de la enfermera Bárbara Ampuero, fue premiada en la ceremonia del Ranking Nacional de Prácticas de Impacto en Economía de la Salud e Investigación de Resultados, organizada por el capítulo chileno de la Sociedad Internacional de Economía de la Salud e Investigación de Resultados (ISPOR Chile) y el Instituto de Salud Pública de la Universidad Andrés Bello. Cabe señalar que ISPOR es una organización que evalúa la economía en salud y organiza este ranking que premia a las mejores ideas innovadoras que aportan a esta temática.

El trabajo llamado «Unidad de Cuidado de la Piel, una herramienta sanitaria costo-beneficio para la prevención y tratamiento de heridas complejas en la atención terciaria de salud» -que Bárbara Ampuero realizó cuando trabajaba como encargada del Programa de Buenas Prácticas Clínicas RNAO del HCSBA – obtuvo el cuarto lugar en la categoría Evaluación de Tecnologías Sanitarias. En la actividad, estuvo acompañada por la enfermera Katerine Vásquez, en representación de la Subdirección de Gestión del Cuidado (SDGC).

«Todo esto partió porque la tesis de mi MBA fue en relación al costo-beneficio económico de implementar una Unidad de Cuidados de Piel en los hospitales públicos. Tomé como modelo económico algunos aspectos demográficos del hospital, datos económicos de costos y datos numéricos de prevalencia e incidencia», señaló Bárbara Ampuero. 

Aquella investigación estaba vinculada al trabajo que realizaba en ese momento junto a Katerine Vásquez en nuestro hospital, con respecto a la prevención de lesiones de piel. «El paso siguiente era abordar las lesiones complejas y entender cuánto nos estaban costando como institución y cuánto podíamos ahorrar si implementábamos y extendíamos las buenas prácticas al tratamiento de heridas. Este trabajo cuantifica los costos reales y el ahorro, pero no sólo desde el punto de vista de los números, sino que también ve el costo-beneficio de satisfacción usuaria, ya que permitió entender que una Unidad de Cuidados de Piel ahorra costo y mejora la calidad de vida», explicó.

Una vez que expuso la tesis, obtuvo una buena nota que le permitió terminar sus estudios y, tras conocer la postulación a este ranking, su profesora le recomendó que la presentara por lo relevante e innovadora. Sobre la importancia de esta investigación, Bárbara explicó que «es un proyecto que siempre me apasionó y creo que realmente tiene un buen impacto si se hace bien a nivel de calidad de la atención, de ahorro de costos institucionales y también de satisfacción usuaria. Yo lo entrego a disposición del hospital para que lo vaya implementando y también apoyo en toda la asesoría que se requiera».

De manera paralela a la realización de esta investigación, en el HCSBA se formó el Comité de Heridas y luego se publicó el primer protocolo de manejo avanzado actualizado en evidencia.