HCSBA participa en proyecto para gestionar Listas de Espera Quirúrgicas no GES

  • A través de un proyecto Fondecyt, se diseñará un modelo matemático basado en criterios clínicos y variables biopsicosociales que permitirá a los equipos médicos caracterizar y priorizar a los pacientes según su nivel de riesgo y vulnerabilidad en el HCSBA.

El Hospital Clínico San Borja Arriarán (HCSBA) fue seleccionado como establecimiento piloto para aplicar una iniciativa que busca optimizar el proceso prequirúrgico para la selección de pacientes en Listas de Espera Quirúrgica no GES. Se trata de un proyecto Fondecyt desarrollado por profesionales de la Universidad Católica del Maule (UCM) -con duración de tres años-, llamado “Sistema de Decisión para la Gestión de Listas de Espera Quirúrgicas no GES en el Sistema de Salud Público de Chile”. Consiste en el desarrollo de una metodología de apoyo a la toma de decisiones para el equipo médico del HCSBA, que le permita gestionar la lista de espera quirúrgica de manera más eficiente, priorizando a los usuarios según su riesgo y vulnerabilidad.

«Construir esta metodología de apoyo a la toma de decisiones es muy relevante para los centros asistenciales, puesto que permite mejorar y optimizar los procesos. Eso favorece, por lo tanto, a una mejor planificación de cirugías, lo que va a traer repercusiones favorables», explicó Fabián Silva, académico de la Facultad de Ciencias Sociales y Económicas de la Universidad Católica.

El Hospital Clínico San Borja Arriarán fue seleccionado como hospital piloto debido a su condición de centro de alta complejidad y la disposición a colaborar en el proyecto. La metodología se aplicará en la Unidad de Otorrinolaringología, con posibilidad de replicarse en otros servicios clínicos del hospital.

El Dr. Esteban Gómez, subdirector de Gestión Asistencial, mencionó que «estamos felices de haber hecho esta alianza con la Universidad Católica del Maule porque vemos una tremenda oportunidad», añadiendo que «estamos trabajando fuertemente en nuestra lista de espera. Hemos reducido notoriamente nuestras medianas de consulta y medianas quirúrgicas. Sin duda, que un modelo matemático que nos dé las herramientas a los clínicos para poder tomar decisiones adecuadas e inteligentes de cómo priorizar, de acuerdo a la vulnerabilidad del paciente y su condición clínica, nos va a ayudar enormemente».

El proyecto va a diseñar un instrumento en colaboración con el equipo de Otorrinolaringología, el cual recogerá información biopsicosocial de los pacientes que esperan por una cirugía. Luego, se realizarán entrevistas al equipo de salud para su ajuste y validación. Con esa información, se desarrollará un modelo matemático, basado en criterios clínicos y también antecedentes no clínicos de los pacientes. Esto permitirá caracterizar a los usuarios según su nivel de riesgo y vulnerabilidad, optimizando el proceso de priorización para controlar la calidad de la lista de espera. La estrategia permitirá a los médicos tener una visión clara de todos los pacientes en espera que requieren atención prioritaria.

Dentro de los beneficios que se esperan obtener, se encuentran, por ejemplo, el mejorar la satisfacción de los pacientes en espera por cirugías, proporcionar información que permita optimizar los recursos prequirúrgicos y la planificación de la tabla quirúrgica y proporcionar componentes de gestión para que la institución de salud pueda gestionar la suspensiones quirúrgicas, entre otros.

Se prevé que el proyecto comience a funcionar a partir de 2026 y tenga una duración de tres años.