Matronas del Hospital San Borja Arriarán asisten exitosamente parto en un taxi

Todo ocurrió el pasado 25 de febrero, cuando Noemí, que ya contaba con 38 semanas de gestación, comenzó a sentir contracciones y, junto a su madre, tomó un taxi que la llevara hasta el hospital. Sin embargo, a mitad de camino “se me rompió la bolsa y comencé a sentir que la cabecita de mi bebé ya estaba saliendo”, relata la joven madre.

Así las cosas, el conductor del taxi se bajó del auto en el acceso al hospital de calle Amazonas y alertó a funcionarias de la Oficina de Atención al Usuario que están permanentemente en el lugar de lo que ocurría en el vehículo, quienes avisaron de la situación de inmediato al personal de matronería.

Tania Arriagada, matrona del área de Ginecología, corrió a verificar la situación y se encontró con que el pequeño Keneth ya estaba prácticamente afuera del cuerpo de su madre. “Junto con una interna terminamos de asistir el parto y recibimos al bebé, que estaba en buenas condiciones, igual que la mamá”, explica la profesional, quien añade que “todo fue muy rápido, pues desde que llegó el conductor del taxi, hasta que el bebé y la madre fueron ingresados al hospital para su revisión y recuperación, no pasaron más de 10 minutos”.

Tras el parto Noemí fue ingresada a la Urgencia de Maternidad, mientras el pequeñito –que pesó 3,130 kg y midió 48 cm- fue derivado hasta la zona de atención inmediata de Neonatología. Luego, ambos fueron trasladados al área de Puerperio, donde permanecieron en excelentes condiciones de salud hasta el alta.